sábado, 15 de mayo de 2021

EL LÍO PALESTINO-ISRAELÍ.


Por: Emilio Doñe.
El origen de esta hostilidad está en que Abraham, es el padre de judíos y árabes. Pues, los judíos descienden de Isaac y los árabes descienden de Ismael. Tanto Isaac como Ismael fueron hijos de Abraham y dada las promesas para cada uno de ellos se generó cierta hostilidad entre ambos hijos. ***(Para más detalles favor leer Génesis, capítulos 16-21).
Esas hostilidades han sido profundizadas con el tiempo por las preferencias religiosas de árabes y judíos, donde existe un largo debate sobre quien es el verdadero hijo de la promesa de Abraham. Recordemos también que los palestinos son árabes.
El punto es, que pese a esas hostilidades, árabes y judíos, vivieron en cierta paz en Medio Oriente.
Acontecieron múltiples episodios, siendo uno de los más conocidos el de los judíos esclavizados en Egipto, que luego fueron liberados y guiados por Moisés, y pesé a la terquedad de la mayoría de los israelitas con el Padre Celestial, pudieron entrar o tomar la tierra prometida.
Pasando de ser un conjunto de tribus dispersas a convertirse en una gran nación, donde hubo momentos como el periodo de los reyes, en que sobresalen Saul, David y Salomón, con la muerte de ese último se acaba la época de prosperidad, ya que las tribus se separaron y el reino de Israel se dividió en dos.
Tres siglos después, Israel paso de invasión en invasión, siendo invadidos en el tiempo por babilonios, persas, griegos y romanos; también pasaron bizantinos, musulmanes y otomanos.
De estas invasiones, la que merece más atención es cuando Nabucodonosor II invadió la región, en esa invasión el primer templo fue destruido y el pueblo judío sufrió un exilio masivo que se mantuvo con los años (este acontecimiento es clave, ya que marca uno los tres tiempos en que se divide el Antiguo Testamento, el cual se divide en pre exilio, exilio y pos exilio).
Es cierto que los persas permitieron que se construyera por segunda vez el templo de Jerusalén, pero siempre existió en muchos judíos ese deseo de recuperar su autonomía, por eso, muchos esperaban que Jesús sería ese rey que les devolvería esa autonomía deseada a fuerza de espada.
Y por ello, muchos de los ganchos (trampas) que le tiran los fariseos y herodianos a Jesucristo como el de Mateo 22, donde para ellos validar el objetivo del Gran Maestro, le preguntaron en esa ocasión sobre la cuestión del tributo y este le responde: que "a Dios lo que es de Dios y al Cesar lo del Cesar".
Al decepcionarse con esté episodio y otros más, se percataron que Jesús no sería el libertador por espada que ellos esperaban en ese momento y lo demás es historia bien sabida...
Con los años los judíos hicieron nuevos levantamientos, que trajeron la destrucción del segundo templo (en el año 70 d. C) y también ocurrió el famoso episodio de la rebelión de Bar Kojba contra los romanos.
Esa rebelión de Bar Kojba, fue todo un fracaso, ya que sólo agravo la desafortunada situación de la minoría judía, un fracaso que provocó la expulsión de los judíos de Judea de manera definitiva, y los romanos cambiaron el nombre de Judea por el de Siria Palestina.
Pese a estar distribuidos por todo el mundo, los judíos mantuvieron la esperanza de volver a su pueblo, lo que se resume en el famoso rezo: "El próximo año en Yerushalaim".
Y para no cansar con historia, cuando los otomanos (turcos) dominan la zona de lo que hoy es Israel, estalla la primera guerra mundial. En esa guerra los otomanos pierden y le quitan la mayoría de territorios, incluyendo la zona donde hoy esta ubicada Israel, que paso a ser manejada por los ingleses.
Bajo mandato inglés (1920-1948), pese a que intentaron frenar la migración judía, la población judía se puso a la par en tamaño con la árabe del lugar, en especial producto de que muchos judíos migraron hacia allá huyendo del holocausto nazi. Estas migraciones provocaron ciertos conflictos entre árabes y judíos, los cuales crearon sus propios grupos de defensa.
Ante esa inestabilidad, los ingleses decidieron retirarse de la zona y dejar en manos de la ONU, el destino de ese territorio. La asamblea general de la ONU aprobó en 1948 la resolución 181, con 33 votos a favor y 13 en contra, con esa resolución se dividió el territorio entre israelitas y palestinos, donde los israelitas tenían menos territorios que en la actualidad.
A esta proclama se oponen los árabes, lo que genero una guerra civil y que los cinco vecinos de Israel le declararan la guerra, donde el resultado es que los israelitas lograron expandir su territorio y expulsar 700 mil árabes.
Luego sigue la guerra del Sinaí por el canal de Suez, y ya en 1967 la famosa guerra de los seis días, episodio en el que Israel lanzo un ataque preventivo contra Egipto, Jordania y Siria, ataque que Israel gano y logro expandir más su territorio, eliminando el estado palestino.
Y siguieron más escaladas que al final obligaron a que exista cierto entendimiento entre Israel y mayoría de sus vecinos árabes, limitándose el conflicto en el tiempo entre palestinos e israelís.
Ciertamente hubo un momento de acuerdo entre el grupo de liberación palestino y los israelitas, donde estos últimos le devolvían la zona de Gaza y Cisjordania para la formación del estado palestino.
Sin embargo, los rencores entre ambos bandos se han mantenido, en especial por los asentamientos de israelitas en los territorios que antes pertenecían a los palestinos, más el trato discriminatorio que según los palestinos les dan los israelitas y el irrespeto de un bando a otro en la celebración de sus actividades religiosas y demás festividades. Esto y más, ustedes verán en las noticias como causa del conflicto actual y futuros.
Pero, la realidad de todo ese caos bélico que usted ve en el mundo últimamente, como este nuevo episodio del conflicto entre palestino e israelitas. Es porque el mundo está prácticamente quebrado económicamente y todas las naciones, en especial las potencias, necesitan que surjan elementos que le reactiven más rápidamente su economía.
Un gran reactivador de la economía, tristemente son las guerras.
Por eso no es coincidencia que grupos o sectores de una x nación, se enfrente a otra, sin causa aparente. Ya que las grandes naciones vendedoras de armas se benefician de estas nuevas escaladas, al vender armas a todos los grupos en conflicto y así aprovechan para reactivar su economía.
Haciendo amagues públicamente de que intentan resolver los conflictos, pero apostando en las sombras a que aumente la tensión y todo tome matiz mundial, ya que en esa región son demasiados los intereses existentes.
Pues aparte de la cantidad de recursos existentes, la mayoría de los árabes son musulmanes chiitas o sunitas y pudieran verse nuevamente tentados en sumarse apoyar a sus hermanos árabes palestinos de forma más directa (por ejemplo, el grupo palestino HAMAS dicen es financiado en parte por los iraníes).
A mi entender, también pienso que independientemente de nuestra postura escatológica, todos debemos orar por la paz de Israel y Palestina, se trata de vidas humanas y Jesús derramó su sangre por toda la humanidad.
Tal y como le expreso Pablo a los Gálatas en el capítulo 3, de que en Cristo todos estamos llamados a ser uno.
Muchas gracias, Dios les bendiga y me disculpo por las posibles faltas ortográficas, esté ha sido un escrito express.
**Foto de Google Images.
***Si gusta saber más a fondo a quién pertenece Jerusalén, aquí le dejo este viejo escrito, que profundiza sobre el tema: http://edumilio.blogspot.com/.../a-quien-pertence...

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