Desde que muchos cristianos presbiterianos hace 246 años hicieron una interpretación de Romanos capítulo 13 para luchar en ese entonces contra la tiranía e iniciar un proceso histórico que trajo como resultado la creación de los Estados Unidos y el establecimiento de un nuevo modelo político (la democracia).
La política estadounidense ha estado llena de muchos elementos muy particulares en sus elecciones, tenemos el caso de Theodore Roosevelt que fue ninguneado por los sectores poderosos de su época y para neutralizarlo le dieron el cargo de vicepresidente.
Sin embargo, con la muerte del presidente William McKinley le tocó asumir la presidencia de USA y se convirtió en un gran dolor de muelas para los sectores de poder, muy en especial para la familia Rockefeller a quien les desbarató su monopolio en el petróleo.
Por otro lado, está el caso de los años 40 del vicepresidente William Wallace que fue aplastado de forma polémica por los intereses del momento y sustituido por Harry Truman, ya que Truman resultaría manejable a los fines de adentrar a USA en una nueva carrera militar mundial y así lo demostró con el uso de la bomba atomica en Japon.
También está el famoso y visionario general Douglas MacArthur y que por un tema de ego, le boicotearon muchas acciones militares, a los fines de que no pudiera desarrollar su carrera política. Ya que luego de una exitosa campaña militar que le dió la victoria en la 2da guerra mundial a USA en Asia, a MacArthur se le asignó hacerse cargo de la situación de la guerra de Corea (1950-1953).
El plan de MacArthur era dominar toda Corea y luego realizar una invasión a China a los fines de que USA asumiera el control de la zona y evitarle un futuro enemigo a su nación. No obstante, en la medida que MacArthur avanzaba en su plan, fue llamado para que detenga su movilización y se creó algo sin precedente, el boicot de una guerra que trajo como resultado la creación de Corea del Sur y Corea del Norte, manteniéndose todavía hoy la zona en tensiones…
Y el siglo XXI no ha sido la excepción, tenemos el caso de las pasadas elecciones del 2020 en Estados Unidos, que han dejado un país totalmente dividido y donde se han alimentado los indicios de que se produjo un fraude electoral contra Trump y hasta de que el mismo coronavirus fue hecho para facilitar su derrota presidencial, teorías que todavía hoy tiene mucho eco.
Todo eso llevó a Trump a realizar una serie de maniobras a los fines de no abandonar la presidencia y que resultaron en fracaso, según él, porque muchos de los grandes líderes republicanos le dieron la espalda, más el hecho de que grandes intereses globales y en especial de USA estaban en su contra.
Ante esa realidad, Trump decidió hacer un nivel de actividad político pos-presidencial nunca antes visto para un ex mandatario estadounidense.
Creó un centro de operaciones políticas en Florida donde recibe potenciales candidatos, participa de galas con funcionarios republicanos y posibles donantes, y de igual forma se comunica con sus seguidores mediante su casilla de emails.
Entres sus estrategias previas a lanzar una nueva candidatura presidencial para el 2024, están la de hacer que los republicanos tengan el control total del congreso para las elecciones legislativas del 2022 y sobretodo de armar una red política propia que se extienda a cada rincón del país y que no dependa del control de la vieja guardia del Partido Republicano.
Y esa estrategia le está dando muchos resultados, ya que en lo que va del año 2021 más de 8.500 militantes trumpistas se han hecho con posiciones de poder, ya sea administrativas o políticas, dentro de las sedes republicanas locales.
Otra de las metas de Trump es vengarse del grupo RINO (Republicanos sólo por nombre), este grupo está compuesto por legisladores republicanos que votaron a favor de que se le realizará un juicio político a Trump, impulsado por los demócratas en enero del 2021.
RINO cuenta con 10 diputados que son liderados por Liz Cheney, diputada por Wyoming e hija del ex vicepresidente Dick Cheney, quien hace meses fue expulsada del liderazgo republicano de la Cámara de Representantes no solo por su ferviente anti trumpismo sino también por estar emparentada más con la agenda demócrata que con la republicana.
Trump ha elegido públicamente sus candidatos a diputados en las demarcaciones que están los del grupo RINO, lo cual ha obligado a que del grupo de los 10 diputados algunos abandonen la política y otros estén con pocas posibilidades de reelegirse.
En el caso del senado, ocho fueron los senadores republicanos que votaron a favor de enjuiciar a Trump, de ese grupo dos ya se retiraron de la política, en el caso de Mitt Romney, Trump le ha acusado fuertemente de traidor y le ha complicado su reelección en Utah.
Y en el caso de Alaska, Trump se ha centrado con todas sus fuerzas en derrocar a la senadora por Alaska, Lisa Murkowski, que ha sido una piedra en el zapato para Trump en el congreso.
Con los otros candidatos, Trump ha decidido negarle su apoyo y elegir leales a él, pero no todo ha sido negativo, en el caso de viejas figuras republicanas como Marco Rubio, Rand Paul, entre otros, Trump ha decidido apoyarlos plenamente por mostrarle lealtad.
El tema está en que si Trump logra instalar a por lo menos 4 de sus candidatos entre los 7 senadores que lo desafían, podría quitarle a McConnell el liderazgo del bloque republicano en el Senado, cabe recordar que McConnell ha sido uno de sus recientes críticos.
Con vistas a su casi confirmada segunda candidatura presidencial en 2024, Trump quiere asegurarse tener bajo control la cuestión del fraude electoral para que los demócratas no vuelvan a salirse con la suya según el, especialmente en los estados claves que deciden la elección presidencial.
Para ello, ha estado eligiendo a sus más leales colaboradores para que ocupen posiciones de poder en los estados que según él fueron fraudulentos y combatan la corrupción demócrata:
**En Texas, el actual Fiscal General, Ken Paxton, disputará la interna con el sobrino del ex presidente George W. Bush y Trump promete hacer campaña a favor de Paxton.
**En Georgia, el diputado trumpista Jody Hice se presentará a internas para ser el nuevo Secretario de Estado.
**En Arizona, el legislador Mark Finchem buscará junto con Trump destronar a Katie Hobbs, la militante ultra demócrata responsable del fraude electoral en ese Estado.
**Y en Michigan, Matthew DePerno, uno de los integrantes del equipo legal del ex mandatario durante el proceso electoral del año pasado, será candidato a Fiscal General.
Trump aún no ha definido candidatos en muchas de las elecciones a gobernadores que sucederán el año que viene, pero sí ha mostrado su apoyo a las reelecciones del gobernador de Texas, Greg Abbott, y buscará que su ex Secretaria de Prensa, Sara Huckabee Sanders, siga los pasos de su padre y se convierta en gobernadora de Arkansas.
En las pasadas elecciones a gobernador de Virginia, Trump apoyó públicamente a Glenn Youngkin, el cual resultó ganador en un estado que los demócratas llevaban décadas controlando y que de igual manera Donald Trump le dio mucha batalla a Joe Biden en el proceso electoral de 2020.
Y en New Jersey la competencia entre republicanos y demócratas fue muy cerrada, algo poco común en Estados tradicionalmente demócratas y debido al descontento de la mayoría de estadounidenses con el gobierno de Biden y forma de comportarse de los demócratas...
La realidad es que pese a Trump haber sido silenciado de redes sociales, de muchos medios de prensa, en tan solo meses y faltando prácticamente un año para las elecciones legislativa de medio término, Trump ya ha lanzado y aceitado su maquinaria política como nunca antes un candidato presidencial lo ha hecho, llevándose el reconocimiento de los oficiales de más alto rango del partido.
Así que atentos, al nuevo plan de Donald Trump, que se las trae…
****Fotos de Google Images y datos de encuestas de Real Clear Polítics.
Es cuanto y Dios les conceda un buen resto del día.
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